No hay cosa que más alumbre
nuestra determinación,
que usar la imaginación,
como fuerza y por costumbre.
La luz del entendimiento
surge para iluminar
y nos cabe preguntar
si es un buen razonamiento.
Nada es artificial,
porque desde el corazón,
brota la imaginación
de una forma natural.
Con tesón y con paciencia,
nuestra mente crea un mundo,
en su sentir más profundo,
fruto de la inteligencia.
En un proceso normal,
toda tu imaginación,
vence toda esa obsesión
de una mente artificial.
Lo natural es pensar
y la mejor herramienta,
la tiene todo el que intenta
la aventura de crear.
Los datos e información,
son estadísticamente,
apuntes para tu mente,
pero siempre la intuición
es el ejemplo mejor,
de que todo creador
dispone en su creación.
Aquel que sueña, imagina
que su voluntad genera
lo que se proponga y quiera,
su labor nunca termina.
Siempre que crea oportuno,
pondrá toda su atención,
porque en su imaginación
no existe límite alguno.
Escrito en Noviembre 2023 por Eduardo Luis Díaz Expósito.
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