Todo marca un tiempo, un ritmo y un latido,
que se acompasa con el pulso del universo.
Todo caudal es una profunda cicatriz
sobre la Tierra, por donde fluye la sangre
de la vida, en agua vertida y convertida.
Arterias que son de vida y ramificaciones
de dedos infinitos, que se alargan
sobre toda superficie, hacia un mar
de destinos, que concluyen o inician
su singladura en otras costas.
Escrito en Noviembre 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.
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