Estos, mis dolores.

Me duele el corazón, por tanto  daño,

 me duelen la mentira y el engaño.
Me duele, cuando  en otros corazones,
apoyan su criterio en las traiciones .


Cuando te halagan y es  por convencerte,
de tu debilidad, para vencerte.
Me duele esta vida pasajera,
si he de permanecer sólo en la espera 
y nunca has de llegar a realizar,
lo que en tu mente  vuela, por soñar.


Por ser,  en tu sensible corazón,
la víctima brutal de una emoción.
Me duele toda esa consecuencia,
que cae de ingratitud en tu conciencia.
Me duele vivir en una historia,
que pierda su sentido en la memoria.


Me duele este siglo que vivimos,
muriendo, aunque  ya no lo advertimos.
Me duele esta tierra, este planeta,
que vaga sin un rumbo, ni una meta.


Me duele este sentimiento fiero,
de ser, a mi pesar… un extranjero.
Me duele la virtud y el pensamiento,
que castra sin razón, un sentimiento.

Me duelen la guerra y la avaricia,
me duelen el miedo y su inmundicia.
Me duele caminar en un desierto,
plagado del  silencio de los muertos.


Escrito en Junio 2022 por Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

© Eduardo Luis Díaz Expósito.”zuhaitz”.

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